Mi perrita Luna

¡Genial! Luna participa en un concurso para conseguir comida gratis durante un año. La mayoría conoceréis a la fanfarrona de mi perra.

Mi cuñado la encontró hace 7 años en el campo, abandonada junto a sus dos hermanitos. Fue un regalo para el cumpleaños de mi hermana. Llegó en condiciones muy malas, llena de espinas, ya que habían estado bajo zarzas, y plagada de pulgas. Así que lo primero que hicimos con el regalo de mi hermana fue quitarle todos los pinchos y dejarla impoluta y desparasitada.

Quedó preciosa, era una auténtica bolita que iba de una parte a otra de la casa con toda la alegría y la vitalidad del mundo. Recuerdo que se resbalaba en el suelo, acostumbrada de caminar sobre la tierra del campo.

Al poco tiempo le pusimos el chip y las respectivas vacunas. Desde que llegó a la casa fue una más de la familia. Siempre dándonos alegrías y motivación. Cada vez que ve triste a uno de nosotros, llorando o nervioso ella lo nota, y va hacia esa persona para intentar animarle y hacer que se le pase todo lo malo.

Incluso cuando mi madre llama a alguno de nosotros y no la escuchamos, ella va corriendo a 'llamar' a esa persona. Nos despierta por la mañana a lametazos, y le encanta acurrucarse a nuestro lado en la cama en invierno, aunque no le dejen, ella siempre acaba escapándose de madrugada. Es muy obediente y cariñosa, y por eso la queremos como si fuera uno más de nosotros.

Hace aproximadamente tres años, al comerse un hueso se hincó una de sus partes en las tripas, empezó a vomitar y excretar sangre. No cesaba, varias veces al día subía al pasillo y lo hacía. Hacía ruidos horrorosos, cada vez que lo escuchábamos alguno de nosotros, si no éramos todos, nos echábamos a llorar porque no sabíamos qué le pasaba y teníamos mucho miedo, ese ruido era lo peor para nosotros, eso, y el hedor tan horroroso que desprendía la sangre excretada, porque no era más que eso, sangre.

Esa misma noche estaba peor que nunca. Todos empezamos a llorar y bajar diciéndole a nuestros padres que la llevaran al hospital, que estaba muy malita y que necesitaba que la vieran o moriría. La cosa fue a peor, y a las tantas de la madrugada mis padres tuvieron que llevarla en coche hasta la zona de la Malagueta para que la vieran en un hospital de urgencia para animales.

Allí la atendieron perfectamente bien, con todos los cuidados necesarios, le dijeron cuál era el problema y le mandaron medicación. En unos pocos días el problema ya había desaparecido por completo y Luna volvió a ser la de siempre. 

Esa perra que siempre está ahí cuando la necesitas, a la que odias cuando empieza a ladrar al escuchar pasar a alguien por delante de la puerta, la más cariñosa cuando te recibe al entrar a la casa como si hubiesen pasado años desde que no te veía, la más juguetona, cuando al hacerle cariñitos y tonterías te trae su famosa toalla para que juegues con ella, y la más tranquila cuando se echa en su cestita y de ahí no hay quien la mueva.

   

Esta es nuestra pequeña Luna. A la que todos queremos con todo nuestro corazón. Por todo esto y por muchísimo más deberíais votarla en http://www.kguau.com/luna-9/ Solo tenéis que pulsar en "Me gusta" bajo su foto con los peluches. No habría nada que le hiciera más ilusión que poder comer gratis durante todo un año n.n